Quiero
que imagines por un momento que estás en el asombroso país de Islandia con una
temperatura exterior de 3 grados centígrados. Asciendes a una montaña, te
aventuras por cascadas y exploras playas. Regresas al hotel después de todo un
día de hermosas y frías experiencias y te quieres bañar para descansar y
relajar tu cuerpo. ¿Qué tipo de temperatura escogerías para darte una ducha
reparadora? Seguramente contestarías… pues la caliente, por supuesto. Igual
respondería yo.
La
realidad que encontré en todos los hoteles fue que efectivamente contaban con
agua caliente, tan caliente que no lograba soportarla. Si acaso había agua
fría, era imposible mezclarla por la avanzada tecnología de los grifos de la
ducha.
¿Qué
enseñanza recibo de esta vivencia? Una de las lecciones es que todo en
exceso es dañino. Debemos elegir con equilibrio y armonía, aún las mejores
cosas de la vida. Por ejemplo, a mí me encanta el arroz con leche como postre.
Si me dan la oportunidad de repetir, siempre respondo que ya está bien con lo
que he comido. Tengo la certeza de que si como más me hastiaría, y perdería el
gusto por aquello que tanto me gusta.
Las
cosas buenas de la vida debemos recibirlas como nos van llegando,
disfrutándolas y valorándolas con gratitud plena. La mesura y el equilibrio al
recibirlas nos permitirá disfrutar más de esas cosas maravillosas, manteniendo,
ante todo, la capacidad de asombro, y promoviendo en el universo el efecto
bumerán que siempre nos proporcionará más y más abundancia.
El RETO que te propongo es: Primero, disfruta en
grande las bendiciones de la vida y agradece por ellas. Segundo: evita los
excesos y mantente en equilibrio y armonía física, mental y espiritual.
Tercero: conoce otras posibilidades y amplia tu capacidad de disfrute.
La vida tiene tanto para darnos, así a veces,
por temores infundados, por costumbre o por hábito, quedemos atrapados en una
manera monótona de vivir, perdiéndonos de la diversidad y la abundancia que nos
es regalada a manos llenas. Este es el otro extremo que debemos evitar y, como
ya lo dijimos, todos los extremos son dañinos.
Con Amor,
Si deseas navegar por nuestro blog y tener acceso a todos nuestros artículos da clic en este enlace BLOGYOLANDAFRANCO.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario