lunes, 26 de febrero de 2024

HAZLO ASÍ SEA CON MIEDO

 




 

Volando de regreso a casa, después de dejar a Islandia con todas sus historias de Vikingos, paisajes surrealistas, edificaciones hermosas, muchas de ellas estilo chalet suizo, iglesias luteranas y tantas otras bellezas más, recordé con mucha gratitud la manera como conseguí hace tiempo superar, entre otros miedos, el miedo a volar.

Han pasado más de 25 años desde que, por mi trabajo, debía desplazarme a varias ciudades de Colombia para asistir a encuentros y convenciones. Esto me representaba tomar un avión frecuentemente.

En los primeros viajes de aquella época, se adueñaban de mí infinidad de manifestaciones de pánico que me sobrevenían cuando se cerraba la puerta del avión.

Normalmente pedía que me dieran un asiento al lado del pasillo, ya que siempre estaba aterrorizada. Me daba taquicardia, sudaba frío, me descomponía física y emocionalmente.

La continuidad de los viajes me obligó a ponerme frente al miedo que me acechaba en esas ocasiones. Recuerdo haberlo pensado en serio y haberme dicho a mí misma: "lo voy a hacer, así sea con miedo". Voy a aprender a controlar esta emoción aflictiva que me limita y que obstaculiza mi crecimiento y desequilibra mi estabilidad.

Así que fui realizando un proceso gradual frente al miedo a volar en avión. Acudía a recursos como encontrar con quien conversar inmediatamente se cerraba la puerta, hacer procesos de meditación, o de atención plena, y todo lo que estuviera a mi alcance. Lo fui venciendo y transformando el volar en una pasión. 

Desde hace varios años disfruto muchísimo de los vuelos en avión. Siempre elijo asientos con ventanilla. Ahora me encanta mirar desde las alturas la belleza del firmamento, los paisajes y las ciudades. 

Creo, por estas experiencias vividas, que siempre es posible vencer nuestros propios miedos, o al menos minimizarlos. Estar libre de ellos es quitarse los límites que ellos nos generan. Es encontrarse con la mejor versión de uno mismo, y darse la oportunidad de adentrarse en la aventura de vivir de manera plena. 

Te propongo ahora como RETO: Primero, identifica tus miedos y escríbelos con sus características en una carta que te escribas a ti mismo, haciéndote una promesa amorosa de comenzar a vencerlos poco a poco. Segundo, realiza aquello a lo que temes hasta que lo puedas dominar. Tercero, aprende lo que el miedo te está enseñando. Cuando lo hagas, el miedo habrá disminuido hasta su mínima expresión, porque el miedo nunca desaparece del todo. Cuarto: Disfruta tu nuevo estado de armonía y felicidad. Has salido una vez más vencedor de ti mismo.

Cierro esta reflexión compartiendo contigo una frase que he adoptado y ha marcado mi vida “EL CONTRARIO DEL AMOR ES EL MIEDO”. Así que vencer el miedo es también poder disfrutar del AMOR en toda su extensión y permitirle que inunde tu vida, dándole más sentido y significado.

Con Amor, 








NOTAS QUE PUEDEN SER DE TU INTERÉS:

Si quieres conocer acerca de  TE ESCUCHAMOS da clic a este enlace. Y si te interesa conectarte conmigo e iniciar una CONSEJERÍA PARA RESOLVER  UNA SITUACIÓN PERSONAL O FAMILIAR, escríbeme por el Whatsapp 3142116160, estaré feliz de compartir contigo. 

Si deseas navegar por nuestro blog y tener acceso a todos nuestros artículos da clic en este enlace BLOGYOLANDAFRANCO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

PASAR A LA OTRA ORILLA

  Aquí entre nos, quiero compartirte una de las reflexiones más hermosas que he tenido en épocas recientes de mi vida.          Antes, hac...