LA MARIPOSA

"LA MARIPOSA"
Un relato extractado del libro “LA CARTA A GARCÍA Y OTRAS PARÁBOLAS DEL ÉXITO”

    Un día un hombre encontró el capullo de una mariposa que estaba luchando por salir. Animado por el fenómeno natural, se sentó a observar mientras la mariposa intentaba abrirse paso por un pequeño orificio. Hora tras hora la mariposa luchaba y luchaba tratando de forzar su figura a través del agujero, sin conseguirlo. Pasaron muchas horas sin que la mariposa hiciera algún progreso.

    Al hombre le pareció que la mariposa había llegado a un punto en que no podía más y entonces decidió ayudarla. Con un par  de tijeras abrió un poco más el orificio en el capullo para permitirle salir. En efecto la mariposa, salió enseguida, pero con el cuerpecito todo  hinchado y las alas arrugadas. El hombre seguía observándola, esperaba que en cualquier momento las alas se endurecerían para poder sostener el cuerpo que, en poco tiempo, se debería achicar.

    Pero sucedió diferente. De hecho la mariposa pasó el resto de su corta vida arrastrándose en el suelo, con el cuerpo hinchado y unas alas inútiles y arrugadas. Nunca pudo volar y rápidamente cayó  presa de otros insectos.

    El hombre en sus bien intencionadas bondad y afán, le había quedado difícil comprender que el pequeño orificio en el capullo, que forzaba a la mariposa a luchar para salir, era como la naturaleza obligaba a que el líquido del cuerpo pasara a las alas, con el objeto de preparar al insecto para el vuelo una vez liberado del capullo.

    Muchas veces esos son los retos que más necesitamos. Si pasáramos la vida sin obstáculos, terminaríamos inválidos y nunca llegaríamos a tener la verdadera fuerza que somos capaces de desarrollar. Por  lo tanto, tal vez, nunca podríamos volar.

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    Tu y yo queremos avanzar hacia nuestros GRANDES SUEÑOS, ¿tú ya los tienes definidos?, emprendemos un camino con metas, decisión y acción. Al dar los primeros pasos encontramos los primeros obstáculos. Si los logramos superar le enseñaremos a la mente que somos capaces de sobrepasar los próximos. En la medida que lo vamos logrando nos hacemos más fuertes, desarrollamos más habilidades y más confianza en nosotros mismos y como lo he mencionado anteriormente, sacamos la mejor versión de nuestro ser.

    Ahora, las personas que están a nuestro alrededor sólo nos pueden ayudar, enseñándonos a pescar, más que dándonos el pescado; nos pueden animar, motivar, inspirar, impulsar, pero nunca hacérnosla tarea, porque si lo permitimos, nos incapacitarán  con la mejor intención y con un mal entendido concepto del AMOR y del SERVICIO.

    Esta lección tan valiosa es para aplicar a la propia vida, a la vida de los que amamos y a la vida de los que nos rodean. Hoy en medio de la situación actual, también nos vemos movidos muchas veces al día por la indigencia de tantas personas. Tal vez, si diéramos más de nosotros, una sonrisa, una palabra reconfortante, una idea poderosa, escucháramos sus circunstancias, estas personas recuperarían su valor para ir a reconquistar el mundo y evitar quedarse atrapados en sus limitaciones, viviendo cómodamente en la infelicidad.

    Cierro esta reflexión con una frase muy venida al caso. “LA ADVERSIDAD ES LA ROCA EN LA CUAL AFILO MI ESPADA”

 

YOLANDA FRANCO
Entrenadora de Vida
EN ALIANZA CON COMUNIDAD GLOBAL
 

PROGRAMA DE TRANSFORMACIÓN DESDE 
EL AMOR Y LA GRATITUD
AUDIO 6 SEGUNDA TEMPORADA